RESERVAS DE HIDROCARBUROS (I)
Se puede definir como los volúmenes de hidrocarburos presentes en los yacimientos que pueden ser recuperados comercialmente a partir de acumulaciones conocidas a una fecha futura. En consecuencia, el concepto de reservas constituye tan sólo la parte recuperable y explotable de los recursos petroleros en un tiempo determinado.
Pero es necesario señalar que algunas partes no recuperables del volumen original de hidrocarburos pueden ser consideradas como reservas, dependiendo de las condiciones económicas, tecnológicas, entre otras, que lleguen a convertirlas en volúmenes recuperables.
Todos los estimados de reservas involucran algún grado de incertidumbre. Esta incertidumbre dependerá de la cantidad de datos de ingeniería y geología, confiables y disponibles a la fecha del estimado y la interpretación de estos datos. El grado de incertidumbre es aplicado para colocar las reservas en una de las dos clasificaciones principales, ya sea probadas o no probadas.
Los estimados de reservas serán revisados a medida que se cuenten con datos adicionales y disponibles de geología e ingeniería o cuando ocurran cambios en las condiciones económicas. Pueden ser disminuidas en el volumen correspondiente a uso propio o pérdidas por procesamiento.
Las reservas pueden ser atribuidas a las que pueden ser producidas por energía natural del reservorio o por la aplicación de métodos de recuperación mejorada.
Una de las tareas básicas del ingeniero de yacimientos es la obtención de un estimado de estos volúmenes, lo cual permitirá clasificar los yacimientos, de acuerdo con su tamaño y así poder empezar proyectos de explotación.
Pero es necesario señalar que algunas partes no recuperables del volumen original de hidrocarburos pueden ser consideradas como reservas, dependiendo de las condiciones económicas, tecnológicas, entre otras, que lleguen a convertirlas en volúmenes recuperables.
Todos los estimados de reservas involucran algún grado de incertidumbre. Esta incertidumbre dependerá de la cantidad de datos de ingeniería y geología, confiables y disponibles a la fecha del estimado y la interpretación de estos datos. El grado de incertidumbre es aplicado para colocar las reservas en una de las dos clasificaciones principales, ya sea probadas o no probadas.
Los estimados de reservas serán revisados a medida que se cuenten con datos adicionales y disponibles de geología e ingeniería o cuando ocurran cambios en las condiciones económicas. Pueden ser disminuidas en el volumen correspondiente a uso propio o pérdidas por procesamiento.
Las reservas pueden ser atribuidas a las que pueden ser producidas por energía natural del reservorio o por la aplicación de métodos de recuperación mejorada.
Una de las tareas básicas del ingeniero de yacimientos es la obtención de un estimado de estos volúmenes, lo cual permitirá clasificar los yacimientos, de acuerdo con su tamaño y así poder empezar proyectos de explotación.
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